Después de terminar la formación en un grado, muchos estudiantes se plantean la posibilidad de continuar ampliando sus estudios. La tentación de dar el siguiente paso y adquirir más competencias es atrayente. Sobre todo para aquellos que, como yo, se sienten muy a gusto en el ámbito universitario. Puedes optar entre realizar un máster o llevar tu formación al máximo nivel de especialización haciendo un doctorado. Ahora bien, ¿sabes qué se necesita para hacer un doctorado? ¿y qué ventajas tiene? En este artículo trataré de dar luz a estas cuestiones.
Si hablamos de niveles académicos, el doctorado es el máximo que se puede estudiar, y como tal, exige un mayor nivel de preparación. Pero precisamente esto es lo que hace grande a esta formación: es un proyecto de vida que va mucho más allá de un logro académico.
Un doctorado es un título que te prepara para ser investigador y contribuir a la sociedad en tu campo de estudio. Significa haberle tomado el gusto a estudiar y querer ir más allá mediante la investigación, para profundizar en la materia y convertirse en un experto en la misma. Una opción para estudiantes con determinación debido al esfuerzo y dedicación que supone.
¿Por qué hacer un doctorado?
Las razones por las que un estudiante decide hacer un doctorado vienen marcadas por sus planes de futuro y como respuesta a unas metas profesionales muy concretas. El principal motivo tiene que ver con la vocación, y realizar una profunda labor de investigación avanzada en el campo elegido, cuyos resultados puedan repercutir y devolverse para ser útiles a la sociedad, así como para su futuro profesional.
La docencia universitaria también es una salida profesional atractiva para aquellos que sienten esta vocación y quieren transmitir su pasión por la materia. El personal docente e investigador (PDI) del futuro es el que ahora elige cursar los estudios de doctorado.
Sin embargo, también veo cada vez más casos de personas que deciden apostar por un doctorado para llevar su conocimiento a un nivel superior que aplicar en su carrera profesional. Su objetivo es adquirir más competencias para alcanzar un perfil más competitivo -de experto-, en el mercado laboral y convertirse en profesionales altamente cualificados.
Por ello, las ramas de estudio de un doctorado son muy variadas. En la Universidad Complutense encontrarás múltiples especialidades en Ciencias de la Salud/Sociales/Jurídicas, Artes y Humanidades, Ingenierías y Arquitectura, todas ellas con interesantes salidas profesionales. Y no olvidemos los Doctorados industriales, que permiten llevar a cabo la Tesis Doctoral en empresas, ni las Tesis en co-tutela, que permiten hacerlas en dos universidades, gracias a las múltiples alianzas de la Universidad Complutense con Universidades extranjeras y nacionales.

¿Qué se necesita para hacer un doctorado?
Si te has decidido por estudiar un doctorado, mi más sincera enhorabuena: tienes ante ti un gran abanico de posibilidades. Pero antes de comenzar este camino, debes tener en cuenta varios factores que aumentarán en gran medida tus posibilidades de triunfar.
El primero de ellos es escoger el lugar donde cursar estos estudios. En España, los centros más elegidos para hacer un doctorado son las universidades públicas. De hecho, según los Datos y cifras del Sistema Universitario Español 2020-2021, de todos los estudiantes que se matricularon en estudios de Doctorado, el 94,3% lo hizo en un centro público.
Las posibilidades que ofrecen estas universidades son las opciones más valoradas por los estudiantes, sobre todo en materia de ayudas. En la Universidad Complutense de Madrid contamos con el programa de Contratos Predoctorales UCM. Se trata de un sistema de becas nacionales que concede contratos para la formación de doctores que realicen una tesis doctoral en centros dependientes de la Universidad Complutense de Madrid.
Después, es esencial que investigues qué se necesita para hacer un doctorado según la especialidad que elijas y las exigencias de la universidad.
Como requisito general, las vías de acceso a estos estudios es estar en posesión de un título oficial español de Grado (o equivalente) y de Máster Universitario. Es necesario que hayas superado al menos 300 créditos en el conjunto de ambas enseñanzas.
Requisitos para hacer un doctorado en España
Asimismo, podrás acceder al doctorado si cumples una de las siguientes condiciones:
- Título universitario oficial de Licenciado, Arquitecto, Ingeniero o título de Doctor/a expedido por alguna universidad española u homologado por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte.
- Título universitario oficial español, o de otro país integrante del Espacio Europeo de Educación Superior, que habilite para el acceso a Máster, teniendo superados un mínimo de 300 créditos.
Si lo prefieres, también puedes consultar los requisitos, documentación y plazos para inscribirte a un doctorado en la UCM a través de este enlace.
Por otro lado, deberás escoger:
- El tema de la tesis doctoral que quieres desarrollar.
- La metodología que vas a emplear.
- La dirección de la tesis. Es importante que tu tutor esté especializado en tu campo de estudio.
- El equipo de doctorandos con los que vas a investigar.
Además de revisar las opciones de financiación y si existen relaciones nacionales e internacionales que te permitan realizar intercambios.
Aspectos a tener en cuenta antes, durante y después del doctorado
- En el caso de que quieras realizar un máster y luego un doctorado, es importante que escojas uno que te aporte los créditos necesarios.
- Aprovecha el Trabajo de Final de Máster (TFM) para avanzar hacia tu tesis doctoral.
- Es muy enriquecedor para tu proyecto que crees una red de contactos docentes y profesionales en torno a tu tesis doctoral.
- Como doctorando tendrás 3 años para presentar tu tesis doctoral, o 5 en el caso de que seas un profesional en activo.
- El doctorado no finaliza con la entrega de la tesis. A posteriori, como experto en la materia, pueden tener lugar: publicaciones, congresos, conferencias, cursos, libros, participaciones en proyectos de investigación, artículos de divulgación y/o de opinión, patentes, participación en comités, etc.
Si no tienes claro qué se necesita para hacer un doctorado, hay 2 factores esenciales que debes tener en cuenta: tu vocación por la investigación y saber elegir una universidad con un proyecto bien definido y que te ofrezca oportunidades reales.
Razones por las que merece la pena para hacer un doctorado
En mi opinión, el título de Doctor/a es el más versátil que puedes encontrar, ya que te da la oportunidad de formarte en un gran abanico de habilidades transversales y de utilidades que serán clave para tu futuro.
Así que, si aún estás planteándote hacer un doctorado, toma nota de los siguientes motivos que he escogido. No solo desde mi experiencia, sino desde la de miles de estudiantes que han decidido seguir este camino en la UCM (¡más de 800 nuevos doctores cada curso!), con muchos de los cuales he tenido el placer de intercambiar puntos de vista:
Grandes oportunidades laborales
Aquellos profesionales que tiene un doctorado tienen una mejor empleabilidad y mayores retribuciones por sus altos conocimientos. Y no solo para las universidades, sino para el sector privado, donde cada vez son más las empresas que apuestan por la incorporación de nuevos talentos altamente formados.
Adquirir habilidades transversales
Un/a doctor/a no se limita únicamente a ampliar sus conocimientos en la materia, sino que además adquiere una serie de competencias durante el proceso de investigación y presentación de su tesis. En un doctorado aprendes a gestionar proyectos, a formular hipótesis y diseños experimentales, a hablar en público, a analizar y sintetizar grandes cantidades de información… Sin olvidar la paciencia, constancia o el espíritu de superación, habilidades esenciales no solo para tu trabajo, sino para una mejor experiencia de vida.
Contribuir a la innovación en tu campo de estudio
En definitiva, aportar algo a la sociedad que sea útil y tenga un impacto positivo.
Orientar tu carrera hacia la investigación y el ámbito académico
Además de poder colaborar en proyectos de investigación y estudios a nivel internacional, tienes la posibilidad de optar a becas para continuar con tu faceta investigadora, y a formar a otros futuros profesionales e investigadores. Eso es “ser doctor”.
Convertirte en un referente
A los profesionales doctorados se les considera desde el primer momento sinónimos de conocimiento. Eso es “ser docto”. Y esto no solo te servirá para posicionarte como un experto y obtener prestigio en tu sector, sino que además crearás una red de contactos muy útiles a través de los seminarios y conferencias en los que participarás como ponente o invitado. Y, como he mencionado anteriormente, tendrás la oportunidad de realizar publicaciones en revistas científicas, estancias en el extranjero, contarás con contactos de alto interés y valor para tu especialización, realizarás viajes y congresos, etc.
La cara “menos amable” del doctorado
Como todo en esta vida, hacer un doctorado también tiene una cara menos amable. Poca financiación por parte de los gobiernos y organismos oficiales. Poca estabilidad para las personas que deciden optar por este camino. Precariedad laboral. Así como la dureza que requiere de por sí, un trabajo tan complejo y poco valorado como es el de la investigación.
Si tu objetivo es seguir vinculado al ámbito académico, sientes verdadera vocación por la investigación o buscas una buena oportunidad laboral, tu futuro pasa por convertirte en doctor/a. Además, adquirirás de un modo práctico y transversal todas las habilidades que se necesitan para hacer un doctorado que te lleve al éxito profesional y personal.